domingo, 11 de noviembre de 2012

Manchas sonoras


Mis manos derraman tinta
aquí y allá 
llenándolo todo
de manchas asonantes
de rimas inciertas
y papeles estropeados
que salpican el suelo.

Son mis manos las que piensan
las que vierten
sus tonos grises
                  sus gritos negros
sobre los silencios rotos
                  teñidos de papel en blanco.

Son mis renglones torcidos,
los que escondo
desde hace años
para que nadie los mire
por encima del hombro.

Son mis palabras
jamás pronunciadas en alto
las que me hacen sentir
en casa,
permanente,
a través de esas manchas sonoras
que escupen mis manos.

Aunque lo parezca


Repaso las manos
enredadas en el pelo
y ahí
quedan las hebras prendidas
del paso del tiempo.
Es otoño
mirad si no mi cabeza.
Ya no luce el sol quemándome
las puntas del flequillo.
Ni es brisa
sino viento
lo que desordena mis pestañas.
Y no es que me lloren los ojos,
no, no son lágrimas.
Es que fuera llueve.
Y es otoño
(o casi invierno)
aunque hoy, 
contigo,
todo parezca verano.

viernes, 9 de noviembre de 2012

He vuelto


Los muebles amanecieron cambiados
desperdigados en folios
rotos sobre la alfombra
(…) cubiertos por el polvo
que empaña la memoria
tras años de ausencia.
Sus aristas ya no cuentan historias
de rencor
reproches ni sombras
y sus cajones muestran la sonrisa victoriosa
que se burla
de un recuerdo insípido.

He rescatado de esos muebles sin fondo
mi hacedor de versos
la rima que da forma a las noches
que se despiertan
sobre un sofá de terciopelo negro
mientras descansa el verbo con pausas
y ya no dibuja vísceras rotas
ni sangre ni lamentos.

He robado al olvido
otra vida
y todas las mañanas que nos quedan
son eternas
llenas de sábanas frescas
recién cambiadas.

He demostrado al pasado
que la fuerza
sobra
aunque se esconde
y se necesita valor para agarrarla.

Camino

Camino
sobre las calles ajenas,
olvidadas
en los rincones de la ciudad,
desconocidas,
desiertas, perdidas.
Me disimulo entre sus muros
sin apartar la vista de aquella
en la que quizás
perdí la brújula,
el norte y el sentido de mis pasos
de los que solo me queda
el eco
palpitando en la memoria.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

(Anotaciones)

En la guerra, tus bolsillos son lo más íntimo que tienes.

Arizona es lo peor.

La magia no existe, siempre hay un truco detrás.

Si alguien te salva la vida, has de ser el resto de tu vida tú y el otro.

Yo siempre he sido un poco hombre.

Cuando me desperté, aún estaba allí. Cerré los ojos de nuevo y entonces supe que todo había sido un sueño.

Cuando uno se levanta a las seis de la mañana tiene hasta el pelo cansado.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Las buenas costumbres


No acostumbraba ya
a anochecer dentro de una pantalla
buscando formas para dedicar versos.

Tú me has descubierto
los besos inesperados
que nunca se leen
las esquinas de las ciudades
llenas de ríos y empapadas de vida
en las que se besa
como si
los labios se terminaran hoy.

Me has llenado las manos
de sol, de cielos, de mares;
me has llevado los ojos
al infinito
allí donde uno más
quiere
y roza casi lo perfecto.

Paréntesis

Busco versos,
versos cortos, largos,
versos de colores
para decorar las paredes blancas
con palabras que me recuerden
que la soledad es solo
un espacio limitado,
un paréntesis,
de esos en los que antes te metías conmigo.